De acuerdo al gerente de una de las franquicias, los restaurantes
Hooters de San Diego han adoptado la política de no servir al alcalde de la
ciudad, Bob Filner, tras las acusaciones en su contra por parte de al menos una
docena de mujeres por acoso sexual.
La imagen fue publicada en Twitter por la directora ejecutiva
del partido republicano en San Diego,
@FrancisBarraza,
en Rancho Bernardo.
“El alcalde de San Diego no será atendido en este
establecimiento. Creemos que las mujeres deben ser tratadas con respeto”, reza
el mensaje.
De acuerdo al sitio Slate, este formato de protesta fue sugerido por el ultraconservador comentarista de Internet Glenn Beck.
No hay comentarios:
Publicar un comentario