Para Guy Whithall, la
fantasía infantil de un monstruo que vive abajo de la cama, se
convirtió por unos instantes en realidad.
El director de un hotel en
Zimbabwe encontró que un cocodrilo de 150 kilos de peso y más de
dos metros de largo había pasado toda la noche abajo de su cama, sin
hacer un solo ruido, la especialidad de estos depredadores.
El cocodrilo podría
haberse refugiado debajo de la cama en busca de calor, informó el
sorprendido hombre.
Con la ayuda de sus
trabajadores, Whithall logró remover sin incidentes al animal para
colocarlo en su hábitat natural en el río Turgwe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario