Las remesas, que han afectado el consumo interno durante los últimos 13 meses, comienzan a exhibir una trayectoria de estabilización con crecimientos aún moderados en los próximos meses, considera el Grupo Financiero Ve por Más.
Ello, luego de que este lunes se dio a conocer que en julio el envío de dólares a México por concepto de remesas alcanzó un monto de mil 841 millones de dólares, cifra superior al estimado por el consenso de mil 800 millones de dólares, aunque representó una caída en términos anuales de 1.2 por ciento.
Isaac Velasco, analista de la institución, destacó que la caída observada fue menor a la observada en los 12 meses pasados.
Además, comentó, fue en julio del año pasado cuando comenzó a desacelerarse el envío de dólares a México, por lo cual los datos dados a conocer muestran 13 meses consecutivos de contracciones.
Así, en su opinión, las remesas empiezan a exhibir una trayectoria de estabilización y en los próximos meses el crecimiento de este indicador será todavía moderado y cercano a cero.
Explicó que esto se debe a que el sector laboral en Estados Unidos continúa recuperándose, en particular, en julio avanzó 2.8 por ciento el número de personas ocupadas en el sector de la construcción.
Sumado a que la apreciación en el tipo de cambio en términos anuales también ha sido un factor limitante en el envío de dinero al país en los meses pasados.
No obstante, comentó, la reciente depreciación de agosto, tanto en términos mensuales como anuales podría afectar positivamente el envío de dólares a México debido al fortalecimiento del dólar.
El especialista indicó que el desempeño de las remesas ha afectado el consumo interno en los últimos 13 meses debido a que las familias que perciben ese ingreso deben reducir su consumo.
Refirió que las ventas minoristas han crecido 1.2 por ciento en ese mismo periodo, por debajo del Producto Interno Bruto (PIB) medido por el Indicador global de la actividad económica (IGAE) de 1.9 por ciento.
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