Un nuevo estudio sugiere que los hombres que consumen mucho alcohol en la mediana edad pueden esperar una disminución más pronunciada, más rápida en las habilidades de la memoria y el pensamiento en una década.
El estudio, publicado el miércoles en la revista Neurology, define el consumo excesivo de alcohol para los hombres como más de 36 gramos de alcohol al día, el equivalente a 2.5 bebidas. Los hombres que beben menos o no beben en absoluto aún así pueden perder algo dentro del terreno cognitivo, dicen los investigadores, pero no tanto. El estudio se centró en las mujeres, pero no encontró resultados claros para ellos.
El estudio sugiere que beber más ligero no contribuye al deterioro cognitivo.
La investigadora principal del estudio, Séverine Sabia, epidemióloga de la Universidad College en Londres comenta que "Los resultados están de acuerdo con estudios previos y sugieren que el consumo moderado de alcohol probablemente no es perjudicial para los resultados cognitivos”.
Dentro del estudio participaron más de 5,000 hombres y 2,000 mujeres, los cuales participaron en un estudio de salud de larga duración en el Reino Unido. A partir de una edad promedio de 45 años, los participantes dijeron a los investigadores cuánto bebían. Una década más tarde, los voluntarios comenzaron a tomar pruebas de memoria y de funciones ejecutivas, el tipo de pensamiento utilizado en la planificación, organización y regulación de la conducta.
Los investigadores no encontraron diferencias importantes entre los hombres que se abstuvieron, dejar de beber durante el estudio o tuvieron un máximo de dos bebidas al día. Los hombres con un promedio de 2.5 ó más bebidas alcohólicas perdieron terreno en pruebas de memoria a un ritmo de casi seis años más rápido que los demás hombres; que declinaron en la función ejecutiva de casi dos años más rápido.
Sara Jo Nixon, profesor de psiquiatría en la Universidad de Florida en Gainesville menciona que es importante señalar que algunos de los hombres en el grupo de consumo excesivo de alcohol bebieron hasta ocho copas al día en promedio.
Por lo que entonces sería erróneo suponer, dice, que los hombres que beben 2.5 tragos al día corren el mismo riesgo que los mayores consumidores de alcohol o que hay un fuerte aumento en el riesgo en ese nivel.
Nixon señala que los investigadores no recolectaron información sobre las borracheras o cuánto participantes estaban bebiendo en el momento de las pruebas mentales. Aun así, ella dice que el estudio es “provocativo” y añade evidencia de que "lo que hacemos en la mediana edad es importante" y "beber a través de un rango podría ser perjudicial para la integridad cognitiva, incluso antes de que las personas envejcen”.
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