Las remesas que los mexicanos en el extranjero enviaron a sus familias en 2013 cayeron un 3,75% respecto al año anterior, informó el martes el banco central.
Los envíos ascendieron a 21.596 millones de dólares en todo el 2013, frente a los 22.438 millones de dólares registrados en 2012, según estadísticas del Banco de México divulgadas en su página de internet.
Sólo en diciembre, también reportado el martes, las remesas aumentaron un 5,5% a 1.798 millones de dólares, sin embargo, los envíos tuvieron a lo largo del 2013 un comportamiento errático, con algunas caídas pronunciadas en varios meses.
Las remesas son enviadas casi en su totalidad desde Estados Unidos, por lo que su comportamiento está directamente ligado a la debilidad o fortaleza de la economía estadounidense.
La mayoría de los mexicanos en Estados Unidos trabaja en sectores que han enfrentado problemas para recuperarse por completo tras la crisis financiera de 2008, como la construcción, los restaurantes y la agricultura.
Las remesas son consideradas una de las principales fuentes de divisas del país.
En Estados Unidos radican más de 11 millones de mexicanos.
Desde que comenzaron a ser registradas en 1996, las remesas de los mexicanos mantuvieron una tendencia creciente hasta 2008, cuando en medio de la crisis internacional iniciaron una caída.
Desde entonces sólo en 2011 se registró un crecimiento importante, cuando aumentaron casi 7% en momentos en que también se reportó una mejoría laboral de los migrantes en Estados Unidos.
El banco central ha señalado que entre las razones del comportamiento a la baja de las remesas están los problemas que ha enfrentado la economía en Estados Unidos, el vecino del norte de México.
Los envíos ascendieron a 21.596 millones de dólares en todo el 2013, frente a los 22.438 millones de dólares registrados en 2012, según estadísticas del Banco de México divulgadas en su página de internet.
Sólo en diciembre, también reportado el martes, las remesas aumentaron un 5,5% a 1.798 millones de dólares, sin embargo, los envíos tuvieron a lo largo del 2013 un comportamiento errático, con algunas caídas pronunciadas en varios meses.
Las remesas son enviadas casi en su totalidad desde Estados Unidos, por lo que su comportamiento está directamente ligado a la debilidad o fortaleza de la economía estadounidense.
La mayoría de los mexicanos en Estados Unidos trabaja en sectores que han enfrentado problemas para recuperarse por completo tras la crisis financiera de 2008, como la construcción, los restaurantes y la agricultura.
Las remesas son consideradas una de las principales fuentes de divisas del país.
En Estados Unidos radican más de 11 millones de mexicanos.
Desde que comenzaron a ser registradas en 1996, las remesas de los mexicanos mantuvieron una tendencia creciente hasta 2008, cuando en medio de la crisis internacional iniciaron una caída.
Desde entonces sólo en 2011 se registró un crecimiento importante, cuando aumentaron casi 7% en momentos en que también se reportó una mejoría laboral de los migrantes en Estados Unidos.
El banco central ha señalado que entre las razones del comportamiento a la baja de las remesas están los problemas que ha enfrentado la economía en Estados Unidos, el vecino del norte de México.
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