Este miércoles, 70 inmigrantes presos en el Centro de Detención del Noroeste de Tacoma, en el estado de Washington, reanudaron una huelga de hambre la cual había iniciado a principios de este mes, al volverse a negar a recibir alimentación.
Los arrestados en el centro de detención de inmigración ubicado en el condado de Pierce, exigen que les mejores las condiciones a unos 1,300 detenidos que hay en el lugar, así como piden que se detengan las deportaciones.
Angélica Chazaro, abogada de uno de los detenidos, se percató del reinicio de la huelga de hambre cuando fue a visitar a su cliente este miércoles. La defensora confirmó que son alrededor de 70 los internos que han rechazado las comidas, luego que las autoridades de la prisión no obedecieron sus demandas iniciales de que mejorarán sus condiciones dentro de la prisión.
La huelga en el centro de Tacoma había inspirado a que se realizara una manifestación similar en el centro de detención Joe Corley de Corley, en Texas, donde un número indeterminado de reclusos anunciaron que se declaran en huelga de hambre.
Andrew Muñoz, portavoz de la agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Seattle, no confirmó que los detenidos hayan reiniciado la huelga. Sin embargo, sí corroboró que sólo uno de los internos, identificado como Jesús Gaspar Navarro, estaba bajo supervisión médica tras ser uno de los primeros que inició el ayuno el pasado 6 de marzo.
Las autoridades de la prisión han advertido que podrían acudir a la alimentación forzada de los detenidos que participen en las huelgas, si ven que su condición de salud está en riesgo.
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