Una mujer de Portland que acostumbraba a golpear a sus tres hijos, terminó matando a uno de ellos, Zachary, un día antes de que cumpliera cuatro años, y en complicidad con su novio, porque consideraba que el niño “era gay”, informaron fuentes judiciales.
Los investigadores descubrieron la culpabilidad de Jessica Dutro, tras leer los mensajes de su cuenta de Facebook entre ella y su novio, Brian Canady.
Ante la evidencia de las pruebas, Canady se declaró culpable de primer grado por su rol en la muerte de Zachary. Como parte del acuerdo con la fiscalía, el novio de Dutro admitió que pateó al niño en el estómago el 12 de agosto de 2012.
Los médicos forenses encontraron que el menor tenía dos agujeros en sus intestinos, y que falleció como consecuencia de “un fuerte trauma abdominal”, y la demora en ser atendido por médicos.
La fiscalía se horrorizó aún más al descubrir que el motivo de la violencia con la que Dutro y su novio trataban al niño, era porque pensaban que sería homosexual. “El camina como ellos y habla como ellos, ugh”, escribió ella.
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