La inestabilidad de la zona donde este domingo se produjo un deslizamiento de tierra en el oeste del estado de Colorado obligó a suspender las labores de búsqueda de tres personas desaparecidas en este suceso.
De acuerdo a reportes de los medios de comunicación locales, casi medio centenar de personas se encuentran trabajando en el rescate de los desaparecidos, pero abandonaron temporalmente las labores de búsqueda ante el riesgo de que ocurran más deslizamientos.
El desprendimiento tiene más de tres kilómetros de ancho y 6 kilómetros de largo, con zonas que han quedado sepultadas con más de 75 metros de tierra.
Stan Hilkey, alguacil del condado de Mesa, en el oeste del estado de Colorado, donde se registró el alud, explicó que el desprendimiento fue “masivo”.
Las autoridades explicaron que los tres desaparecidos fueron a la zona a investigar problemas de irrigación relacionados con un desprendimiento previo y estaban viajando por la zona en un todoterreno cuando se produjo el segundo deslizamiento.
Según Hilkey, los desaparecidos, un hombre de 46 años y un padre y su hijo de 51 y 24 años, respectivamente, son personas conocedoras de la zona montañosa en la que se movían.
Debido a que se trata de un lugar remoto en el que no hay poblaciones cercanas, no se cree que haya más desaparecidos.
El pasado marzo, un alud similar en el estado de Washington, en el noroeste del país, ocasionó 41 muertos en la localidad de Oso.
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