El próximo 10 de mayo iniciará una campaña que busca otorgar la residencia permanente a 500 mil “dreamers”, jóvenes indocumentados, que recibieron en 2012 la llamada Acción Diferida (DACA) del presidente estadounidense Barack Obama.
“Queremos obtener una resolución del presidente Obama porque en Acción Diferida en dos años podrían quedar en un limbo”, declaró Osvaldo Cabrera, dirigente de la Coalición Latinoamericana Internacional (CLI).
Dijo que con base en tanta inseguridad urge esa protección que les deje el presidente antes de terminar su gestión. “El mayor peligro es que cuando Obama termine si llega un republicano o hasta un demócrata que no comparta con sus decisiones podría revocar y afectar a todos”.
Esta campaña buscará recolectar por tres meses firmas de votantes registrados en 10 estados con ciudades con población latina para ser entregadas en la Casa Blanca y en el Congreso.
Con el programa de Acción Diferida, se benefician con un permiso temporal unos 500 mil jóvenes ilegales llamados “dreamers”, que fueron traídos por sus padres de pequeños a Estados Unidos.
Sin embargo, a la fecha sólo han obtenido ese beneficio unos 120 mil y el resto no lo han hecho por falta de recursos para el trámite o por desconocimiento, indicó Cabrera.
La campaña iniciará el día de las Madres en la Plaza Olvera y será encabezada por Jonathan Alexander Martínez, quien es uno de los símbolos de niños ilegales en este país.
A los ocho años fue detenido cuando cruzaba el Desierto de Arizona en busca de su mamá y fue mantenido en un centro de detención, lo que causó protestas. “La verdad si no llega la Patrulla hubiera muerto ahí porque iba con mi primo, pero ahora sé cuál es mi misión y por eso quiero encabezar este movimiento”.
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