Un profesor ha sido fichado y sentenciado a más de 23 años de prisión tras las rejas. Se le acusa de haber cometido abusos contra niños en Estados Unidos.
El maestro John David Boyle se dedicaba a impartir clases de deportes en la secundaria Royal Oak en Covina, Valle de San Gabriel.
A sus 52 años se declaró culpable de producir pornografía infantil y de involucrar a menores usando Internet para cometer estos actos ilícitos. Lo hizo por varios meses.
Él mismo reconoció que molestó a un niño de 14 años. Primero lo conoció por Internet y luego, una vez que entraron en confianza, lo forzó a realizar actos de pornografía.
Entonces, el juez federal Stephen Wilson, al escuchar los hechos, no dudó en sentenciar al hombre a 282 meses de prisión.
Su captura se logró por un agente encubierto que chateó con él y pactó una reunión en un salón de clases, en donde Boyle creía que iba a tener una actividad sexual con un menor.
Una vez estando en el aula, los agentes especiales de seguridad enfrentaron a Boyle y tomaron varios dipositivos digitales que estaban en su poder.
El profesor de educación física fue arrestado de manera inmediata. Una vez bajo arresto les permitió a las autoridades accesar a sus cuentas en línea, incluyendo una desde donde distribuyó pornografía infantil.
De acuerdo con las autoridades, Boyle abusó por lo menos de otro menor en la década de los 80.
"El acusado es un depredador sexual que ha evitado su detección para evitar la aplicación de la ley. Es un peligro extremo para la comunidad pero sobre todo para los más vulnerables como lo son los niños", se lee en el escrito que lo condena.
Cuando el juez Wilson le dictó sentencia, especificó que estos crímenes eran "horrendos" y que el "daño hecho a las víctimas era incalculable".
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