El día de hoy, John Boehner, el presidente de la Cámara de Representantes estadounidense, ha solicitado al presidente Barack Obama que autorice el uso de las fuerzas armadas en la frontera con México para controlar el flujo de inmigrantes menores.
El congresista republicano envió una carta al jefe de la Casa Blanca en la que señala que permita el empleo de las unidades de la Guardia Nacional con el fin de garantizar la seguridad de los niños indocumentados y sus familias.
En su misiva Boehner acusa a Obama de ser el responsable de esta "crisis de seguridad nacional y humanitaria" por lo que es él quien debe resolverla con medidas inmediatas y ofensivas.
Según el legislador, como consecuencia de la política migratoria de la actual administración, "estos indocumentados creen que pueden quedarse indefinidamente cuando llegan a tierra estadounidense porque nuestras políticas de aplicación de la ley los alientan a arriesgar sus vidas y las de sus hijos".
El congreso estadounidense recibió el martes último un proyecto de ley para incrementar significativamente los fondos destinados a enfrentar esta crisis, para lo cual prevé una asignación de dos mil 280 millones de dólares al Departamento de Salud y Servicios Humanos.
Los fondos serían para alimentar y dar refugio a un estimado de 130 mil niños que pudieran arribar al país en los próximos años.
Según estadísticas oficiales, desde octubre de 2013 a la fecha llegaron a territorio estadounidense más de 47 mil menores solos, cifra que pudiera ascender a más de 70 mil cuando cierre el año fiscal actual el 30 de septiembre próximo.
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