Este jueves La Junta Estatal de Control de los Recursos Acuíferos de California aprobó una propuesta que multará con hasta 500 dólares a los residentes que no cumplan las regulaciones de la sequía.
La normativa entrará en vigor a partir del primero de agosto, y se multará a las personas que no cumplan ciertas regulaciones como el lavar vehículos sin una manguera con control de salida, así como el desperdicio en el riego de jardines.
Aunque en enero el gobernador Jerry Brown declaró el estado en emergencia por la sequía y en abril firmó una orden ejecutiva estableciendo medidas para combatir la falta de agua, el consumo de agua en California ha aumentado en lugar de disminuir, según un informe presentado hoy.
El estudio dado a conocer por la Universidad de California Davis, señaló que el consumo de agua en California aumentó un 1 por ciento a pesar de que el gobernador invitó a un ahorro del 20 por ciento. El reporte revisó datos presentados un mes atrás, que mostraban que el consumo de agua había disminuido 5 por ciento.
Según destacó hoy Felicia Marcus, presidente de la junta, al comentar los resultados del informe, los datos muestran que muchos californianos "no son conscientes de la gravedad de la sequía" en el Estado Dorado.
El análisis mostró que el incremento se atribuye especialmente a las comunidades costeras del sur de California y a una porción en la parte noreste del estado, aunque no determinó las causas del incremento.
Según el análisis, que compara los datos de consumo de mayo de este año en relación con el año anterior, las ciudades utilizan cerca del 20 por ciento de todo el agua del estado mientras la agricultura es responsable por el consumo de 75 por ciento del total.
Según el informe del Monitor de Sequía de los Estados Unidos, dado a conocer el 10 de julio, el 36.46 por ciento del Estado Dorado se encuentra en una situación de sequía "excepcional", presentando un aumento del 13 por ciento en los últimos tres meses.
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